La puerta cortafuego es un sistema de protección pasiva ante cualquier incendio de una propiedad, específicamente en edificios para evitar que el fuego se extienda hacia otras áreas del inmueble, además facilita el proceso de evacuación durante una emergencia de las personas que habitan el lugar.

Cabe destacar que la mayoría de ellas son metálicas y deben tener requisitos mínimos, entre ellos es que sean resistentes al fuego y que se puedan abrir para el paso de emergencias y que se cierra de forma automática protegiendo eficazmente cada espacio.

Asimismo, también pueden ser de madera o vidrio, cualquiera de estos modelos son instalados en zonas estratégicas para dividir los espacios de una edificación, logrando así la división del inmueble por sectores, si es una construcción muy grande tendrá muchas áreas o sectores donde será necesaria una puerta cortafuegos.

Cerrajeros profesionales que han trabajado con esta marca específica de cerraduras, enfatizan que si alguno de esos sectores se incendia, la puerta cortafuego evitará o disminuirá la posibilidad de que el fuego pase a otras áreas y el humo se propague a otros sectores, facilitando una evacuación segura y un rescate rápido y con resultados positivos.

¿Qué son las puertas cortafuegos?

Características de una puerta cortafuegos

Las puertas cortafuegos deben ser resistentes al fuego, algunos diseños pueden ser más resistentes aunque el objetivo de todas es cumplir con ciertas características:

Aislamiento: ambas hojas de las puertas deben evitar que el fuego las traspase, evitando así que el calor pueda afectarlas y el fuego se extienda.

Integridad: debe tener la capacidad de soportar los daños del fuego y no dejar que se expanda ya sea por el escape de humo o llamas. Para esto es importante que las hojas de la puerta queden bien ajustadas y que cumplan bien su función.

Resistencia: el tiempo de resistencia de estas puertas deben ser aproximadamente entre 30 o hasta 120 minutos.

Durabilidad: en el caso del autocierre, es decir debe mantener la ligereza, la fuerza y la velocidad, sin presentar ningún defecto o avería por la cantidad de veces que se somete al día de movimientos de apertura y cierre.

¿Dónde ubicar una puerta cortafuegos?

Cerrajeros expertos, quienes trabajan con la marca de dispositivos a a continuación, comentan que usar una puerta cortafuego no es solo limitado, podemos instalarla en viviendas privadas o establecimientos que requieran medidas efectivas contra incendios, no solo está restringida a grandes edificaciones o estructuras públicas.

Por su parte, las puertas cortafuegos se utilizan en establecimientos como cines, teatros, instituciones educativas, centros comerciales, oficinas, hoteles entre otros, la mayoría de sus fabricantes están en constante innovación en la elaboración de este tipo de producto y siempre cumplen con los requerimientos de acuerdo al espacio, adaptándose así a cada estancia.

Cabe destacar que la vida útil de esta puerta es máximo de 20 años, aunque es recomendable sustituirla en menor tiempo, sobretodo en los casos donde la puerta se usa regularmente, si es necesario realizar algún tipo de reparación deben utilizar piezas originales, no se puede escatimar en gastos.

Si el mantenimiento no se hace de forma adecuada o no se usan las herramientas necesarias y repuestos originales, la puerta no cumplirá con el 100% de sus funciones y en el caso de incendios el fuego se propagara sin problemas.